La importancia de llenar la vida de nuevos y buenos propósitos
Así lo ratifica un estudio de la Facultad de Medicina Feinberg de Northwestern University (EE.UU.) y publicado en el Journal of the American College of Cardiology, que ha analizado cómo el entorno social o el bienestar psicológico pueden ayudar a fortalecer las perspectivas de las personas con alguna enfermedad.
El estudio define la salud cardiovascular en dos partes: conductas de salud (dieta saludable, actividad física, tabaquismo e índice de masa corporal) y factores de salud (presión arterial favorable, colesterol total y glucosa).
Previamente algunos estudios habían demostrado relación entre el optimismo (una faceta del bienestar psicológico) y la enfermedad cardiaca, incluido una investigación de 2017 que mostró que las mujeres mayores más optimistas tenían un riesgo 38% menor de mortalidad por enfermedad cardiaca.
En este nuevo trabajo, los científicos han observado que los pacientes más optimistas tenían menos probabilidades de ser fumadores y realizaban más actividad física de forma regular. Además, tenían dietas más saludables ya que consumían más frutas y verduras y menos carnes y productos procesados.
"El bienestar psicológico influyó en la salud del corazón a través de procesos biológicos, comportamientos de salud y recursos psicosociales. Tener una sólida red de apoyo social también les brinda confianza a los pacientes sobre su salud futura y les ayuda a actuar con prontitud en el asesoramiento médico, participar en la resolución de problemas y tomar medidas preventivas activas", indicó el experto.
Compartir en: