Factores que reducen el riesgo de padecer cáncer de ovario

Detectar un cáncer en una etapa temprana es algo muy difícil. Por ejemplo, solo un 20% de los cáncer de ovario se detectan a tiempo. Ante esto, aproximadamente el 94% de las pacientes viven más de 5 años después del diagnóstico y se trata de una supervivencia global, sin tener en cuenta edad, tipo histológico o fase de la enfermedad. Así lo determina la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). 

A día de hoy se desconoce la forma de poder prevenir el cáncer de ovario, pero existen algunos factores asociados que minimizan la probabilidad de contraerlo. Por ejemplo, haberse sometido a una ligadura de trompas, extirpación de ovarios o ambas cosas. También haber tomado píldoras anticonceptivas durante cinco años o más., o incluso haber optado por la lactancia materna. 

El principal objetivo de las pruebas que se realizan para el diagnóstico del cáncer de ovario tienen como finalidad descubrir el cáncer en una etapa temprana. Pero, ¿cuáles son esas pruebas?

• Análisis de rutina: se aconseja visitar al ginecólogo una vez al año y poder realizar exámenes pélvicos que nos ayuden a poder encontrar este tipo de cánceres en sus etapas iniciales.

• Prueba de sangre CA-125: muchas mujeres con cáncer de ovario tienen altos niveles de CA-125 por lo que puede ser muy útil para saber si una mujer tiene cáncer de ovario.

• Ecografía transvaginal (TVUS):  gracias a las ondas sonoras se puede examinar el útero, las trompas de falopio, los ovarios y encontrar una masa (tumor) en el ovario.