Qué es una Persona Altamente Sensible. (Foto: Envato)

Qué es PAS y por qué es tan importante en la salud mental

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Finalmente, se le está dando la debida importancia a la salud mental. Hemos pasado de ignorar nuestras necesidades mentales a prestarles una atención sin precedentes.

Cada vez se habla más sobre trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), depresión y estrés, lo que ayuda a la población a reconocer los síntomas y saber dónde buscar el apoyo necesario en caso de ser necesario.

En el ámbito de la psicología, se utiliza un término que ha estado circulando durante algunos años para referirse a las personas que son "lloronas" y se emocionan fácilmente con cosas hermosas, se entristecen por malas noticias, se sienten abrumadas por una sobreexposición a estímulos y experimentan las tragedias de los demás como si fueran propias.

Estas personas son conocidas como Personas Altamente Sensibles (PAS). Sin embargo, a menudo se confunde a las personas altamente sensibles con las hipersensibles, cuando en realidad son cosas completamente diferentes.

Las personas PAS experimentan la vida con una intensidad emocional y mental mayor. Es importante aclarar que ser una persona altamente sensible no es una patología. Ser PAS se considera un rasgo de personalidad que implica un mayor desarrollo de la capacidad de percibir, recibir, sentir, analizar, integrar y responder a los estímulos.

Aunque las personas altamente sensibles tienen una apreciación profunda por el arte y la belleza, esto se vuelve un desafío cuando sienten con gran intensidad el sufrimiento o el dolor físico o mental.

Todas las personas tienen sensibilidad, pero en el caso de las personas con alta sensibilidad, la forma en que responden a ciertos estímulos puede afectar su bienestar emocional y su calidad de vida.

Según PAS España, de aquellos diagnosticados con PAS, el 53% son mujeres y el 47% son hombres. Las investigaciones actuales han identificado cuatro pilares fundamentales que se encuentran en las personas altamente sensibles:

  • Profundidad en el procesamiento de la información: realizan un análisis profundo y exhaustivo de los estímulos cognitivos, lo cual lleva a una respuesta más intensa.

  • Gran sensibilidad y empatía: experimentan reacciones más extremas debido a su forma intensa de vivir y sentir.

  • Sensibilidad a las sutilezas del entorno: perciben de manera más efectiva las sutilezas del entorno, como olores, sabores, texturas y estímulos visuales.

  • Saturación mental y sobreestimulación sensorial: debido al exceso de información y a la sobrecarga de estímulos, las personas altamente sensibles pueden sentirse abrumadas y sobreestimuladas.

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