Las picaduras de avispas y abejas, segunda causa de alergias

Compartir en:
fjrigjwwe9r1_articulos:cuerpo
El riesgo de reacción anafiláctica (alergia) en niños por picaduras de himenópteros, avispas o abejas, se incrementa en los meses de verano, según advirtió hoy advierte la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (Seicap).

Aunque los mosquitos son los insectos que más pican a la población infantil, las picaduras de himenópteros -por ejemplo avista o abeja- son más graves, ya que pueden derivar en reacciones alérgicas. Ante el riesgo incrementado en la época estival, la Seicap aconseja extremar la precaución al aire libre.

Durante los meses de verano, sobre todo en agosto, las picaduras de insectos son muy habituales, lo que supone un motivo frecuente de visitas a la consulta del pediatra, señaló la doctora Cristina Ortega Casanueva, pediatra alergóloga de la Seicap.

Las picaduras de himenópteros suponen la segunda causa de anafilaxia en niños, según el Registro Europeo de Anafilaxia. "Cuando pican puede suceder que aparezca un síntoma muy localizado con enrojecimiento o hinchazón en la zona de la picadura, o síntomas generalizados, que es lo que conocemos por anafilaxia", indicó la doctora Ortega.

El tratamiento a seguir tras una picadura dependerá de la severidad de la reacción. "En primer lugar, se deberá aplicar hielo o una compresa fría en la zona para reducir la inflamación y el dolor, además de lavarla con agua y jabón, sin frotar, para evitar que se infecte", afirma la doctora Ortega. Siempre que sea bajo prescripción médica, se puede aplicar un corticoide tópico o un antihistamínico oral para aliviar el picor.

El siguiente paso deberá ser acudir a la consulta del pediatra alergólogo para que determine las pruebas a realizar y confirme la presencia de alergia al veneno de los himenópteros.

Además, recuerda que los menores que hayan sufrido ya una anafilaxia por este motivo deben llevar siempre durante sus vacaciones un autoinyector de adrenalina.
Compartir en: